Por un lado, es inevitable que cada director (o guionista, o productor) imprima sus puntos de vista y sus ideas en cada película que hace. Evidentemente, si Scorsese, Tarantino o Wes Anderson hicieran una biopic sobre Trump -por ejemplo- serían muy diferentes entre sí, aunque la historia realmente sea una sola. Cada uno ve lo que le interesa o lo que quiere ver, porque una película no es lo mismo que una lista con las existencias de un depósito.
El caso más notorio es el del Quentin cuando en "Erase una vez en Hollywood" cambia totalmente el desenlace de la noche en la que cuatro integrantes del clan Manson asesinan a la hermosa actriz Sharon Tate. Conectado con otra escena de la misma película -aquella en la que Brad Pitt se enfrenta a un pilladísimo Bruce Lee- parece innegable un pensamiento extraño que me invadió al ver el film: el director cree re-modelar a la Historia o al Mundo, filmándolo. Como si pudiera transformar la verdad histórica con su verdad en celuloide.
O sea, como evidentemente Bruce Lee le pareció un matón de pacotilla, es que lo presenta así en la película, en uno de los varios episodios secundarios que nutren su novena obra. Asimismo, él cree que filmando a dos "superhéroes" destrozando a los asesinos (tanto dándolos hasta el hartazgo contra una pared o quemándolos vivos) reinvindica a Tate. O hace justicia, o algo de eso.
Por otro lado, el humor es tomado por alguna gente como un arma para atacar directamente a quien se detesta. Pero hecho sin ninguna gracia ni elaboración, sino prácticamente como una puteada. Quizás sea injusto, porque hay insultos que sí tienen tanto gracia como elaboración y que da hasta gusto ser puteado así. Ahora se me ocurren dos memorables en la historia del cine: A) Cuando en "El exorcista" Linda Blair (o el demonio que tiene de okupa en su cuerpo) le dice al sacerdote al que se le murió hace poco la vieja: "-Tu madre es la mayor chupapitos actualmente en el Infierno". ¿Cómo superás eso, más viniendo de alguien que vive generalmente por allí?. B) En "Ed Wood" le preguntan al veterano Bela Lugosi algo de que él y Boris Karloff eran los dos grandes actores de terror de la época y el Bela contesta, indignado: "-Por favor, Boris Karloff ni siquiera era digno de oler mis pedos". Otra vez, insuperable.
Me dispersé. El tema es que en 2008 David Zucker -integrante del trío Z.A.Z., que he mencionado varias veces en los últimos tiempos por aquí- realiza una adaptación de una novela corta de tema navideño de Dickens llamada "A Christmas carol" (algo así como "un cuento" o "una fábula de Navidad". Pero la centra en atacar a alguien que odia con toda su alma: Michael Moore. Zucker, confeso republicano ultraconservador pretende destruir la imagen liberal de Moore y traer unos porotos para su caverna, pero la cosa no es tan fácil como él creyó hace más de 15 años.
La mitad de los chistes de "An american carol" son de gente dándole cachetazos a Michael Malone, como se llama el personaje. Quizás fui generoso: es el 90 % del humor de Zucker, tanto que a uno le dan ganas de decirle: "-Loco, andá y pegale de verdad a Moore y no me jodas a mí".
La crítica a las opiniones de Moore -un tipo polémico, sí- son del nivel de catalogarlo como "antiamericano", de que quiere suprimir el 4 de Julio y la película que va a filmar se llamaría "Mueran, cerdos fascistas". Todo muy sutil.
Zucker reclutó a todos los actores republicanos que consiguió: Jon Voight, James Woods, Gary Coleman, Dennis Hopper y alguno menos conocido. Está también Leslie Nielsen, de quien no confirmé su conservadurismo político, pero lo tendría o capaz que actuó por amistad al director. Como para hacer todo más burdo, sobre el final Washington y Patton le enseñarán a Malone los verdaderos valores americanos y éste terminará aceptando que los republicanos tienen razón.
Esta bazofia fue un fracaso comercial más que importante y hundió definitivamente la carrera de su director. Se encuentra en Youtube sin subtítulos. Ni falta que hace.
LA PREGUNTA INGUGEABLE:
Ya que no hay YETPAP esta semana, hagamos una pregunta de esas que ninguna IA te pueda dar la solución.
Hay un equipo de fútbol de Primera División en Argentina -de los 28 (¡) que componen esa divisional- al que nunca se lo llama por su verdadero nombre. Cuando digo "nombre", me refiero a cómo nos referimos a él en un partido. Por poner un ejemplo del ascenso del mismo país, decimos juegan Chacarita contra Quilmes y no "Club Atlético Chacarita Juniors contra Quilmes Atlético Club". "Chacarita" y "Quilmes" alcanzan y sobran como nombres de esos cuadros.
No me refiero a apodos ("xeneixes", "millonarios", "canallas") ni a siglas (UAI). Me refiero al nombre, que no es con el que lo conocen. No sé si sirve como pista pero hay otro club con ese mismo nombre ahorita mismo también en Primera División y a ese sí, lo nombran correctamente.
MELAMMU:
Podría poner uno a uno, todos los temas que componen la discografía de Led Zeppelin, incluyendo "Coda", el último LP realizado con canciones rechazadas, luego de la muerte del baterista Bonham, probablemente el mejor de la historia. A continuación: "Black dog" del album "IV", el de los dibujos para cada músico.
LA PROPAGANDA PEYONA DEL MES
FAMILY SAVIOR: SCREW PUZZLE - Hay infinidad de juegos para celular en donde una mujer tiene uno o dos niños muy pequeños y están congelándose en una casa con las ventanas rotas o con brutos buracos en las paredes por donde ingresan alegremente el viento gélido y la nieve.
La idea es, obviamente, irle mejorando la vida a esa pobre mujer y a la inocente bendición. En la publicidad donde se muestra (más o menos) cómo se juegan estos cosos, generalmente aparece el salvador virtual de la chica pintándole la pared o arreglándole la canilla con sus ganancias en puntos, dejando sin cambios a la ventana rota por donde sigue entrando un chijete de cagarse. Curioso.
En esta app en particular, el detalle extraño que justifica su inclusión en esta sección intermitente, es que la chica en cuestión está con los mocos colgando no sólo cuando está tirada en la calle nevada, sino desde antes, cuando vivía con su marido infiel. Este al ser descubierto manoseándose otra señora, no tiene mejor forma de solucionar la situación que echando a la chica, con moco y todo, de un esplendoroso voleo que la hace caer a una cuadra de su casa. Y no exagero.
Ahora, ¿por qué esa muchacha tiene los mocos colgando durante toda la propaganda? Hablo no de una agüita incolora, sino de un moco esplendoroso y bien espeso, de esos que hacen asquear hasta a un forense veterano. Por suerte, conseguí una imagen desmoqueada:
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SEAN LOS ORIENTALES TAN ENFERMOS COMO ESTÚPIDOS (XXIV)
Su apellido en portugués significa "salado" y se podría considerar que lo es, no en el sentido que se le da en Perú (de yeta) sino más bien el del Río de la Plata, especialmente en los últimos tiempos: de alguien o algo grosso, pesado, significativo.
La opinión pública lo conoce como la cara visible de CUTCSA, pero no sabe que Joao Saladinho es funcionario de la As. Española desde hace por lo menos 20 años (seguramente más) con el cargo -perdón porque escribo de memoria y no quise confirmar este dato con amigos que aún trabajan ahí para no comprometerlos- de "Asesor en temas institucionales". Su salario es un misterio, es de las (muy pocas) personas cuyos emolumentos no están disponibles a los funcionarios de RRHH de la Institución. Supongo que no será poca plata en una empresa con un déficit creciente y asfixiante y una decadencia enorme en la calidad de sus servicios.
O sea, a su amigo Tabaré Vázquez lo asesoraba graterola en su gobierno -no sé si se acuerdan- pero a la mutualista le cobra (o más) como hacen los que -sí- trabajan ahí.
Pero Joao no sólo hace esa changuita para poder llegar a fin de mes. No, ha colocado a todos sus hijos trabajando allí -faltaba más- sin temer que algún Gerente los haga echar porque una mina que se volteaba (el Gerente) le dio manija contra ellos. Como le pasó a un columnista de este blog.
Empecemos por el hijo médico. Parece simpático y de esos que no te enterás que el viejo es quien es por su boca. El tiempo dirá si seguirá así o cambiará. Cuando era practicante, una vez se pidió dos meses de licencia sin goce de sueldo. Hizo el trámite correspondiente y yo, que tenía que controlar a los practicantes, mandé la notificación normal para que le descontaran esa licencia. No se la descontaron. Insistí el mes siguiente y nunca me contestaron. Me sentí obligado a hacer una nota poco común dirigida a mi jefa detallando mis trámites para que le descontaran los dos meses. No porque me interesara particularmente si le pagaban o no a Saladinho Jr., sino porque cualquier día de esos saltaba el tema y no iban a cagar al hijo del poderoso, evidentemente.
Otro hijo es el actual Vicepresidente del Consejo Directivo. Y no, no entró exactamente por concurso. Se me podrá objetar que la lista fue votada en elección democrática, con voto secreto y la mar en coche. Y tienen razón. Pero me gustaría que me explicaran los méritos de este Saladinho (h) para ascender tan rápidamente en la lista democrática. Los tarados que repiten el discurso de la meritocracia supondrán que el nene trabajó y se esforzó más que yo para llegar tan alto en la vida. Ja.
Pero más interesante es el caso de la esposa. La señora O. V. de Saladinho, según todos quienes la conocen mejor que yo, es una dama amable, simpática y que no molesta a nadie. Tampoco hace un carajo, la verdad. Pero, a diferencia de tantos y tantos jefes que hacían menos que ella que no hace nada, parecería que no jode a nadie y eso es un mérito, quizás involuntario.
Comenzó su esforzada labor en la denominada Policlínica Las Torres -enfrente del Montevideo Shopping-, un solar que le pertenece a la familia y que le alquilan a la mutualista por un monto secreto, que muy probablemente el propio Consejo Directivo nunca controló. Su primer cargo fue de Jefa de Sección. Ese que a mí me costó 25 años conseguir. Probablemente se esforzó más que yo.
Encima de ella se designó a una funcionaria que tenía un par de añitos apenas de experiencia en la Española, como Jefa de Departamento. Fue justamente una semana antes que yo entrara como Delegado Obrero en el Consejo; si no hubiera saltado porque siempre -sin excepciones- las Policlínicas Zonales eran dirigidas por Jefes de Sección. No había razón para ese ascenso de la funcionaria nueva. O sí, porque era muy amiga de la hija del Gerente de la época, factor que posibilitó muchos ascensos, como veremos más adelante.
Unos años después, la señora De Saladinho se separó del susodicho y se fue a vivir a la Ciudad de la Costa. Para ello, fue designada Sub Gerenta del Interior (cargo hasta ese momento, inexistente). Aparentemente, la Masonería no los deja divorciarse. Pero lo que me llamó la atención fue que la señora siempre era la segunda y tenía alguien sobre ella. Pronto comprendí la razón: la doña no hacía un sorete ni tomaba ninguna responsabilidad, limitándose a cobrar su jugoso sueldo. La que laburaba y tomaba decisiones era la que estaba arriba.
Últimamente, se le dio por el tema de la informática y, sorpresivamente (ironía), apareció como Jefa de algo en el Centro de Procesamiento de Datos -vulgo Computación- sin que haya ni un puto funcionario que sepa qué hace allí ni qué no hace. O, mejor dicho, si necesitás un jefe que tome una decisión, rumbeá para otro lado. Yo sé por qué te lo digo.
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