"La Publicidad, a, a, a, ad"

"Mad Men". Icónica serie sobre una agencia de publicidad. 

Buenos días/tardes/noches para todas y todos. En esta oportunidad, la Caja de Chocolates vuelve a abrirse para meterse un poco en el mundo de la publicidad. 

Planeta Tierra, año indefinido en el futuro. La humanidad se ha autodestruido. Solo quedan las ruinas de las ciudades como testigo de lo que alguna vez fue una “civilización”. En el medio de la noche, de entre las nubes, baja una nave espacial. Aterriza, sin saberlo, sobre las ruinas de un shopping. Los alienígenas salen de la nave con la misión de explorar la zona. En su curiosidad, uno de los exploradores da con un generador de energía, con la buena suerte de que funcionaba aún. Lo enciende. El viejo shopping vuelve a alumbrarse. En su festivo renacer, se prenden las pantallas, las cuales exponen a los aventureros una serie de imágenes y sonidos de publicidades donde todo es felicidad. Que son los únicos testimonios que quedaron de la humanidad. Los extraterrestres registran todo y enseguida les surge una pregunta: “¿Cómo se pudo ir todo a la mierda si, de acuerdo a las imágenes que veían, todo estaba perfectamente bien?" 

Esto bien podría haber sido el guión de una pauta publicitaria (una meta-publicidad, digamos). Pongámosle que los extraterrestres subían a la nave y tomaban un refresco de sabor cola, o se ponían el perfume de la marca del señor que anda a caballo. Capaz lo presente en alguna productora.

La "Publicidad", o más bien el “Advertising” es una herramienta muy importante que tienen las empresas para promocionar sus productos y/o servicios a la población en general. Y tiene una función muy simple: “comunico A y espero B”, donde “B” es claramente nuestra guita. Y está bien, si la “T” da trabajo a 200 familias, imaginemos todas las familias que dependen del sustento que obtienen de trabajar en las diferentes empresas. La forma en que reparten las ganancias es otro tema.

Estas columnas no pretenden ser una cuestión de "publicidad mala, pichí, caca", pues hay publicidades que recordamos con cariño y son verdaderas piezas de colección.  Pero también hay ejemplos donde la publicidad envejeció realmente muy mal (o directamente no debió hacerse una pauta con determinado tema). Para remarcar un poco este punto, les comparto este video de la bebida "American Club", para su producto "piña colada". Tiene todas las "red flags" como dice la gurisada ahora. Y no se pierdan el detalle de la última señorita.

Quizás no tengamos en cuenta que la publicidad, en un sentido amplio, educa. O más bien, instruye. Busca influir en las decisiones que tomamos cuando vamos al almacén o al supermercado. Por eso es necesario poder discernir el mensaje que recibimos. Pues puede perderse en el bombardeo publicitario al que pasivamente asistimos todo el día. Vemos la publicidad cuando nos despertamos y abrimos las redes sociales. Luego cuando andamos por la calle, en los ómnibus, en la cartelería, en todos lados. Cuando miramos YouTube, si no pagamos, te interrumpe el video que estás viendo con algo que generalmente no querés ver (¿no se dan cuenta los avisadores que generan el efecto contrario?). Cuando miramos un partido de fútbol y la jugada viene por la tribuna América (o la tribuna Delgado, o la Henderson) y aparece un banner que nos tapa al tipo que viene con la pelota justo cuando viene otro de frente y se le tira al piso. No vemos si lo fauleó, si le quitó la pelota o si lo gambetearon por ver el “cartelito” de la yerba o de la moto. 

Vamos a hacer un punteo, que se desarrollará en sucesivas columnas, no van a ser muchas.

A) La mente detrás de la publicidad: los creativos.

Son esa casta que anida en el corazón de las agencias de publicidad. Son los que antes eran simplemente “redactores”: llegaba un cliente que quería anunciar un producto y en la agencia se dedicaban a difundirlo describiendo sus principales características. Ahora, con la necesidad imperiosa que tienen las marcas de diferenciarse (porque básicamente hacen todos lo mismo) eso no alcanza. Sobre el producto o servicio además tienen que venderte un modo de vida, una sensación, una pertenencia. En suma, tienen que venderte humo. Hace años que trabajo en empresas de consumo masivo y conozco cuánta plata, tiempo y recursos dedican a promocionar un producto y cuánto quieren diferenciarlo de “la competencia”. 

B) Propaganda

La "publicidad" es una forma de propaganda. Pero mientras que aquella tiene mucho más que ver con aspectos comerciales, ésta es entendida como  "una forma de transmisión de información que tiene como objetivo influir en la actitud de una comunidad respecto a alguna causa o posición", según dice la Wikipedia. Muchas veces se la relaciona con tiempos bélicos o revolucionarios, y tiene que ver mucho más con comunicaciones de origen estatal o partidario. A través  de la propaganda, se busca la adhesión de la gente a una causa, una idea o una facción. Sin duda, el símbolo de la propaganda es Joseph Goebbels, quien fuera el Ministro de la ídem del partido devenido en régimen nacionalsocialista de Hitler. Pero la propaganda es mucho más que esa visión maquiavélica y ramplona que muchas veces se le adjudica, y me propongo en otra columna desarrollar este punto. Pero de todos modos les dejo este afiche español donde se invitaba al público en general a acceder a las bibliotecas.

Afiche de la República española aprox. 1937. A mi me encanta el mensaje de este afiche, hasta me emociona.

Por acá la voy a ir dejando. En las siguientes columnas, como dije, voy a ir desmenuzando este tema. Pero para que quede un buen sabor de boca, les voy a dejar una pauta uruguaya que seguramente muchos recordarán con cariño. Hasta el próximo encuentro.