Bueno, quizás no tan chica, porque la actriz que interpreta ese papel ya pasó los 40 años. "Trenque Lauquen" (2022) transcurre en la ciudad homónima, cuyo nombre en el idioma de los indios que estaban ahí, significa "Laguna redonda", como aclaran en el film. Film que resultó el ganador en ese año del Premio a Mejor Película de la Sociedad Internacional de Críticos, superando a títulos como "Aftersun", "Tar", "Los Fabelmans", "Godland", "Alcarrás" y "La decisión de partir", entre las que se estrenaron aquí.
Trenque Lauquen. |
Aclaro que a partir del párrafo siguiente, hay varios spoilers. "Trenque Lauquen" dura más de 4 horas y fue dirigida (y co-libretada) por Laura Citarella. La otra escritora fue la también protagonista, Laura Paredes. Conocida por entregar una brillante participación como denunciante en "Argentina, 1985" y por integrar el colectivo actoral "Piel de Lava" junto a Valeria Correa, Pilar Gamboa y Elisa Carricajo, quien también actúa en "Trenque..." (ver foto 1), quienes fueron la columna vertebral de la mucho más larga "La flor", que probablemente tenga su propia Canchita en un futuro cercano.
Laura Paredes es una actriz solvente, con cara de buena tipa (ver foto 2, donde además demuestra que no a todos les queda bien el bigote como a mí) que aquí es una funcionaria municipal que está de novia con Rafael Spregelbund (ellos y el próximo personaje que voy a presentar se llaman como los actores). Cuando comienza la película, Laura ha desaparecido y todo hace pensar que por voluntad propia. Rafael y el compañero de trabajo de ella Ezequiel van a tratar de encontrarla pero no lo van a hacer ni nunca van a entender por qué ella se fue. Y nosotros tampoco, porque "Trenque..." es una película de final abierto.
Hay dos ejemplos en la historia del cine de clásicos con finales abiertos que hicieron historia y que seguramente vamos a volver a mencionar por aquí: "Rashomon" (1950) de Akira Kurosawa, y que famosamente mostraba un mismo hecho contado por cuatro versiones diferentes y contradictorias y "La aventura" (1959) de Michelangelo Antonioni, donde una mujer desaparecía y nunca nos enterábamos qué había pasado con ella. Hasta hoy.
En el caso de la película italiana, al director lo que le interesaba era mostrar la indiferencia que esos burgueses (su novio y su mejor amiga) sentían ante la desaparecida y ante todo. Luego se hacen amantes, más porque tienen todo y son lindos que por pasión. Si la chica tuvo un accidente, la mataron o se suicidó, es irrelevante para esos supuestos "malla oro" que Antonioni veía vacíos.
La aventura. |
Tampoco lo sabemos en "Trenque Lauquen". Creo. El recorrido de la protagonista Laura, que es buscada -juntos y por separado- por su novio oficial, el petulante Rafael y por su compañero de trabajo que está metejoneado Ezequiel, mucho más callado y modesto; el recorrido, decía, incluye una historia de amor prohibida de hace 50 años, algún ser medio misterioso que no sabemos si es animal o humano y alguna otra anécdota, pero lo fundamental es que nada de eso parece impactar en la vida de Laura y el final, en la que ella comienza a vagar por el país -como lo hacía otro personaje en una historia contada- sin rumbo fijo y sin propósito, es también un final. No contesta si la encontraron los dos hombres que la buscaban, si abandonaría definitivamente su carrera -y su vida- o si va a seguir vagando, de la misma manera que en la historia relatada por cartas, no se sabía cómo terminaba la mujer que caminaba.
A diferencia de los dos ejemplos clásicos, aquí la resolución sí importa a la directora. El problema es que no lo conoce. Y esa es su respuesta.
Rashomon. |
En resumen, estamos intoxicados de muchos años de ver series (las de capítulos unitarios) en las que cualquier crimen se resuelve en 60 minutos -incluyendo la publicidad- que parece que nos sentamos únicamente frente a una pantalla para recibir la revelación de quién es el asesino y lo demás es accesorio, cosa que ni siquiera es válida para las típicas novelas de Agata Christie, aquellas en las que varios personajes están encerrados en una habitación y uno de ellos es el homicida.
Cuando una película -una buena película- omite el supuesto desenlace, no es porque se le olvidó al director y/o libretista o porque no sabe contar una historia como dios manda. Simplemente, como en "Trenque Lauquen" quiere hacernos la pregunta y dejar a cada uno la respuesta posible.
2 Y.E.T.P.A.P.
JERZY STUHR (77) - De ascendencia austríaca, trabajó con los más importantes directores polacos de los 70 (Zanussi, Wajda, Zulawski, Holland), haciéndose conocido para el aficionado uruguayo por "El aficionado" (1979) de Kieslowski y por la comedia "Sexmission" (1984) de Machulsky. Muy popular y requerido en su país, volvió a ser visto por aquí cuando apareció en "Blanc", segundo capítulo de aquella particular trilogía de Kieslowski, en donde repetía el papel cómico que había realizado (junto a su hijo Maciej, también famoso actor) en el último mediometraje del "Decálogo" del mismo director. Últimamente, había aparecido en varios films de Moretti, incluyendo "Lo mejor está por venir", actualmente en cartelera y que fue su último trabajo.
Dada la nula repercusión que tuvo la historieta subida en las anteriores 14 columnas, voy a continuar en este espacio con el terror, pero desde otra perspectiva más terrenal, menos fantasiosa y, seguramente, más sangrienta. Porque, uruguayas y uruguayos, a partir de esta semana y vaya uno a saber hasta cuándo, voy a presentar adelantos de mi próximo libro "Sean los orientales tan enfermos como estúpidos", con crónicas de mis experiencias de 36 años atendiendo público en una conocida mutualista capitalina, libro que no estará pronto antes de que finalice el juicio que le estoy siguiendo a quien en setiembre será designado Gerente General de la empresa y luego de allí, pueda contarlo todo con libertad.
Todos nos hemos clavado alguna vez yendo a una oficina o comercio y encontrárnoslo cerrado con un cartel que diga: "tal fecha (justo la que decidiste ir vos) cerrado por ser el Día del oficinista justo de eso". A mí también. Mala suerte, tenés 1 en 365 posibilidades, esperás que no te vuelva a pasar en tu vida. Pero está cerrado y aunque patees las ventanas, ese día se quedaron en la casa. Aprovecho la ocasión para informar que en la salud pública, es el 20 de Octubre y en la privada (ergo, mutualistas), el 11 de Setiembre. Y no, no es por homenajear a las Torres Gemelas, porque el decreto (o ley) fue firmado por el siempre bien ponderado Julio Ma. Sanguinetti en 1985.
Como obviamente no lo van a fletar de un boleo al tipo que está entubado en un CTI porque hoy sea 18 de Julio, ponele, es que los sanatorios no están totalmente cerrados en los feriados. Si te caés en la calle y te lastimás la cara y las piernas -pongamos un ejemplo más bien leve- podés ir a cualquier hora a la emergencia y te van a atender, sí, igual que un día cualquiera. Pero no podés ir a sacar número para consulta con tu dermatólogo porque las oficinas están cerradas. Y por más que le grites al funcionario que atiende en la ventanilla de Puerta de Emergencia, van a seguir cerradas. Vení mañana.
-Yo soy abogado. Respuesta: "van a seguir cerradas" (en un 50 % de los casos son tan abogados como yo)
-Yo soy prima del diputado Chanchulleti. R: "van a seguir cerradas"
-Yo no sabía que el 11 de Setiembre cierran por lo de las Torres. Y como yo no sabía, tienen que abrir" R: "van a seguir cerradas"
-Yo soy periodista y los voy a denunciar. R: "van a seguir cerradas". Nunca denuncian, es más probable que hagan TikTok antes que periodismo.
-Si yo digo que tienen que abrir, tienen que abrir. R: "sí, yo chasqueo los dedos como Thanos y aparecen 100 médicos, 50 enfermeras y 10 administrativos trabajando"
-Yo vengo todos los años el 1º de Mayo como hoy y siempre están abiertas. R: "Jajaja"
Resumiendo: Ya sea por ser un feriado desconocido (mala suerte, acordate de Bin Laden) o general (mucha gente ha pretendido hacer trámites en Navidad, 1º de Enero o 25 de Agosto), si llegás y está todo cerrado es porque hay una normativa que lo determinó y nadie va a ir a trabajar. No jodas más, imbécil.
2 comentarios:
ResponderBorrarI) cuando todos estábamos embelezados con Darín, corrimos a ver "Tesis sobre un homicidio" que creo tmb tiene un final abiero (o no entendí la historia, q puede pasar)
II) una de las cosas q me llamó la atención de aquella "Rashomon" es la disposición de los personajes cuando un testigo contaba el hecho: había gente dispuesta en la supuesta pared de atrás y daba ña sensación de que uno tmb era parte oyente de ese testimonio.
Muy interesantes ambos comentarios, Diego de mi barrio natal. Efectivamente, "Tesis..." queda abierta. Lo de Rashomon no me acuerdo, pero tengo copia para volver a verla.
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