"Hola, soy Sheila.."

La Caja de Chocolates

Nunca se sabe de qué carajo puede venir la nota.

    Antes que nada, agradezco la posibilidad que me da Andrés de participar en su blog. Estoy haciendo mis primeras armas en esto, por eso la referencia a Sheila de Los Choby´s, (aunque yo no me gané ninguna rifa), que viene por el lado de que nunca encaré algo así, aunque siempre quise escribir cosas. Y sólo tengo Twitter, ya que en general no me gustan las redes sociales (usé y tiré).

   Dejando de lado este costado amish, soy una persona bastante estándar. Les cuento: soy Diego de Sayago, aunque nacido en La Blanqueada, un lejano 25 de enero de 1983. Ya de chico trillé varios lugares del país gracias a la profesión de mi padre: me tocó vivir varios años en Mercedes, un año en Rocha, otro tiempo en Treinta y Tres y luego en Minas. Hasta que me decidí a volver a la capital con 19 años. Mis padres y hermanas se aquerenciaron en Minas y ahí viven hasta hoy. 

    

   Entré a la Facultad de Humanidades e hice la Licenciatura en Educación. Finalicé la carrera y pretendo seguir estudiando.  

   Estoy casado y tengo un hijo de 4 años. Hace 6 años vivo en Sayago, acá formé mi familia. Por eso adopté el barrio. Mientras tramito mi título de Licenciado, sigo trabajando en otra cosa que nada tiene que ver, esperando pegar el estirón.

   Soy hincha de Peñarol, trekkie y fan de Buenos Muchachos. También del Carnaval. 

    ¿De qué viene este espacio? Mi idea inicial es ir yendo entre escribir cuentos por un lado y reflexiones en otro momento. Por eso adopté este nombre, para darme cierta libertad y luego ir acomodando mi perfil. Me gusta escribir en clave de humor, tengo por referentes al señor Don Lubo Adusto Freire (obviamente), a Darwin Desbocatti, Nacho Alcuri, a los Monty Python, al humor de Saturday Live Night, los viejos Simpsons, a Capusotto y cosas por el estilo. Me gusta mechar algo de Filosofía y sobre todo, Historia, aunque no voy a ser muy insistente con eso. Así que algún día me voy a descolgar con algún intento de cuento de humor medio bizarro, otro día voy mandar algo de historia y filosofía en la cultura popular. 

   Bueno, espero que me acompañen. Ya les dejo una historia que escribí especialmente para esta inauguración. Les mando un abrazo y desde ya, bienvenidas y bienvenidos. La Caja de Chocolates está abierta.

-.Divina Creación.-

Érase una vez, en un día cualquiera en el Paraíso:

-Hola, ¿Dios? ¿Estás en la oficina? ¡Diooooss!

-Hola Adán, ¿cómo andás? Vine tan pronto escuché que alguien golpeaba las manos. -dijo Dios mientras venía chancleteando y pisándose un poco las bolas, ya que era la octava vez en el día que tenía que atender a Adán, aunque el día en el Paraíso dura 4.238 horas y 32 segundos -¿Te puedo ayudar en algo?

-Ehh… Sí… mirá Dios, estoy muy copado con esto de la “creación”, soy muy fan, te quedó “divina” jeje.

-Sos una chispa, Adán…-le contestó, al tiempo que le empezaba a costar disimular la cara de orto.

-Perdón, Dios. Voy al grano. Te decía que no puedo estar más contento con este mundo que te mandaste, yo también veo bien eso de separar las aguas de la tierra, la noche del día, que hayas creado a las plantas y a los animales para que me sirva de ellos, y te diría que hasta Eva te salió muy bien, estabas inspirado ese día…

-Seguís yéndote por las ramas, Adán, te parecés a tus ancestros.

-Ok, Ok Dios, perdoná. Te quería decir que todo bien con todo esto, pero…me aburro.

-¿Cómo que te aburrís, con todo esto que creé para vos? Mirá que no lo hice de la noche para la mañana…seis días me costó, papá.

-Está bien, Dios, no te calentés. Pero, a veces me aburro. Paso todos los días con Eva, vamos del lago a una catarata, pasamos por los arcoiris, jugamos con los conejos y los rinocerontes, pero llega el momento de que no tenemos nada más que hacer, de qué hablar. Y ella se va por su lado y yo arranco para el otro. Y pasan las horas, al final me paso rascando un huevo. Hablando de eso, el otro día, estaba abajo de un árbol “actuando” sobre la zona, y me di cuenta de que si me frotaba bastante, eso estaba bueno, y le seguí dando hasta que cayó un rayo…

-...que Yo mismo te envié. Sabés bien que no me gustan esas cosas. Ya había hecho lo mismo con Eva. 

-Ok, bueno, una sugerencia entonces: inventate el papel higiénico. Porque me pegué flor de cagazo, me limpié con lo que tenía a mano, que era un cardo. Me quedó el quetejedi a la miseria.

-Bien, Adán, dale que no tengo tiempo. En otra línea temporal estoy teniendo bastante laburo…justo me agarraste con África que en realidad no le doy mucha bola. Pero ahora antes de que cayeras me llegó una notificación al celular de que tengo a un tal Sturla, que se calentó por no sé qué partido de mierda que le encajaron un Viernes Santo. Debe ser medio salame. Ahora tengo que ver cómo lo conformo. -dice, mientras pone sus 6 brazos en jarra.

-Bueno, justo de eso te quería hablar. El otro día me encontré con la serpiente, le conté de todo este tema y me dijo que porqué no hablaba contigo a ver si me podías conseguir uno de esos.

-¿Un qué? ¿Un celular?

-Sí, uno de esos. A vos parece que te tiene bastante entretenido. Cuando paso cerca de acá veo que no apartás la barba de la pantalla. Y cuando te das cuenta de que vengo pasando te lo escondés entre los pechos.

-Es que en realidad el celular es un invento del demonio, y yo tengo que controlar, que poner orden. Por eso no te lo puedo dar así nomás. Y dejen de juntarse tanto con la serpiente. Ya comienzo a sospechar de ella. Les llena la cabeza con cosas raras, la otra vez por llevarle el apunte, con Eva se pusieron a jugar con la zanahoria, una verdura que les dije que estaba terminantemente prohibida. Pero parece que ustedes tienen un temita con eso de las tentaciones. No me dejaron otra que intervenir y por eso ahora pasa a ser una fruta la prohibida, la manzana.

-Que hasta ahora no la tocamos, como acordamos.

-Es verdad, se vienen portando bien este milenio. Ok, les doy el celular, pero yo les creo el usuario, ¿estamos?

-Bárbaro, por mí está bien.

-Bien, aquí vamos…tenés Netflix, que en realidad el catálogo es medio escaso aún, puras cosas de la Biblia y series coreanas.

-¿Qué es la Biblia, Dios?

-Es como un librito que todavía no está editado del todo, recién empezamos con el Antiguo Testamento.

-Ah, notable...

-Twitter... eso está interesante, es mi preferido porque puedo ver gente puteándose sin razón aparente. Un plato...lo interesante es que gracias a Twitter hay gente que en nombre de mis supuestas "Fuerzas del Cielo" pusieron a uno de presidente que habla con su perro muerto. Pero yo no tengo nada que ver, que busquen en otro lado. A ver, Adán, a vos te recomiendo Facebook para que arranques.

-Ok,dale, me sirve.

-Bien, empecemos por crearte el usuario. “Adán”...ya está tomado, parece. Te pongo “AdánCapo”...también está tomado. Este seguro no lo tiene nadie: “Adántpmlp”. Listo. Ah mirá, ya tenés una invitación de amistad.

-¿Ah sí? ¿Quién es? 

-“El colorado de Omar”... Debe ser joda esto, la concha de la lora, me cago en mí mismo…¿está acá también? Es el indicio que esperaba para reiniciar este mundo.

-Pero pará, Dios…no seas malo.

-No te preocupes. En 5 minutos te despertás y hablamos de nuevo. Chau.

Chasquea los dedos y Adán vuelve a despertar.

Desconcertado, un poco chamuscado por el reinicio, en bolas como Terminator, se pone de pie y golpea las manos:

-Dioooos! Diooos! ¿Estás en la oficina?

-El Fin (o el Comienzo)-